Septiembre 2023
Las 10 claves para diseñar una interfaz de usuario fácil de usar
¿Quieres crear una interfaz de usuario que sea fácil de usar y que les haga a los usuarios sentir que están en buenas manos? Si es así, las 10 heurísticas de Jakob Nielsen son un excelente punto de partida.
Estas heurísticas son principios generales que se basan en años de investigación y observación de cómo las personas interactúan con la tecnología. Al seguirlas, podrás crear interfaces que sean intuitivas, eficientes y agradables de usar.
Aquí tienes un resumen de cada heurística, y de paso, te dejamos algunos ejemplos de cómo se pueden aplicar al diseño de IU:
1. Visibilidad del estado del sistema
Los usuarios deben saber en todo momento lo que está pasando y qué pueden hacer a continuación. Para ello, proporciona comentarios claros y oportunos sobre sus acciones y el estado del sistema.
Ejemplo: Cuando un usuario hace clic en un botón, el botón debería cambiar de estado para indicar que se ha presionado. También podrías mostrar un mensaje de confirmación o un indicador de carga para informar al usuario de los resultados de su acción.
2. Correspondencia entre el sistema y el mundo real
El sistema debe usar un lenguaje y una terminología que sean familiares para los usuarios. Evita usar jerga o términos técnicos que puedan confundirlos.
Ejemplo: Si tu interfaz tiene un botón de "cerrar", usa un icono de "x" para que los usuarios lo reconozcan fácilmente.
3. Control y libertad del usuario
Los usuarios deben tener control sobre sus interacciones con el sistema. Permíteles deshacer y rehacer acciones, y personalizar la interfaz según sus preferencias.
Ejemplo: Incluye un botón "atrás" para que los usuarios puedan volver a una página anterior. También podrías permitirles crear atajos de teclado para sus acciones favoritas.
4. Consistencia y estándares
El sistema debe ser consistente en su diseño y comportamiento. Esto ayudará a los usuarios a aprender y usar la interfaz de forma más eficiente.
Ejemplo: Utiliza los mismos iconos y símbolos para representar acciones similares. También puedes usar la misma fuente y esquema de colores en toda la interfaz.
5. Prevención de errores
Diseña el sistema para evitar que los usuarios cometan errores. Valida la entrada del usuario antes de enviarla y proporciona sugerencias para corregir errores.
Ejemplo: Si un usuario intenta introducir un correo electrónico no válido, muestra un mensaje de error claro y conciso.
6. Reconocimiento en lugar de recuerdo
Los usuarios no deben tener que recordar información de una parte del diálogo a otra. Haz que los objetos, acciones y opciones sean visibles y fácilmente reconocibles.
Ejemplo: Utiliza etiquetas para identificar todos los elementos interactivos de la interfaz. También puedes utilizar tooltips para proporcionar información adicional sobre estos elementos.
7. Flexibilidad y eficiencia de uso
El sistema debe ser flexible y adaptarse a las necesidades de diferentes usuarios. Permite a los usuarios personalizar la interfaz y realizar tareas de forma rápida y eficiente.
Ejemplo: Proporciona atajos de teclado para acciones comunes. También puedes permitir a los usuarios guardar sus preferencias para que no tengan que introducirlas cada vez que utilicen el sistema.
8. Diseño estético y minimalista
El diseño del sistema debe ser agradable a la vista y libre de desorden. Concéntrate en los elementos esenciales de la interfaz y evita utilizar demasiados colores, fuentes e imágenes.
Ejemplo: Utiliza un diseño simple y consistente. Usa un número limitado de colores y fuentes. Evita utilizar imágenes y animaciones innecesarias.
9. Ayuda a los usuarios a reconocer, diagnosticar y recuperarse de errores
Los mensajes de error deben ser claros y fáciles de entender. Proporciona información sobre cómo solucionar el problema.
Ejemplo: Utiliza un lenguaje sencillo para explicar los errores. También puedes proporcionar instrucciones específicas sobre cómo solucionarlos.
10. Ayuda y documentación
Además de un diseño intuitivo, es importante proporcionar ayuda y documentación a los usuarios. Esta documentación debe ser fácil de encontrar y debe adaptarse a las necesidades de diferentes usuarios.
Ejemplo: Incluye una guía del usuario que explique cómo utilizar el sistema. También puedes proporcionar ayuda contextualizada que sea específica para la tarea que el usuario está tratando de completar.
Consejos para aplicar las heurísticas de Nielsen
- Pon a los usuarios en primer lugar. Piensa en cómo los usuarios interactuarán con tu interfaz y diseña en consecuencia.
- Sé consistente. Utiliza los mismos elementos de diseño y comportamientos en todo el sistema.
- Prueba con usuarios reales. Pide a las personas que prueben tu interfaz y obtengas su feedback.
- Sé flexible. Las heurísticas de Nielsen son una guía, no una regla. Adapta el diseño a las necesidades de tu usuario y de tu producto.
Conclusión
Al seguir las 10 heurísticas de Nielsen, podrás crear interfaces de usuario que sean fáciles de usar, intuitivas y agradables. Estas interfaces harán que los usuarios se sientan cómodos y seguros, y querrán volver a utilizarlas.